Arte público, porque la vida no es sólo coser y cantar
Empecé a bordar estos textos, extraídos de páginas web de contactos, porque creo que son importantes y dan pistas acerca de nuestra sociedad actual y la hipocresía que exhibe en torno a estos temas.
Los textos son reales, en ellos se puede apreciar toda la crudeza que exhiben este tipo de anuncios. He respetado las posibles faltas de ortografía y las tipografías.
Con “arte público” pretendo resaltar uno de los muchos eufemismos con los que antiguamente se designaba a las prostitutas, “mujer pública”.
Mi intención no era hacer un planteamiento complaciente ni decorativo de esta problemática. El proyecto está concebido para poner en entredicho las terribles cargas sexistas que permanecen en la sociedad actual, enfrentándolas al problema de la prostitución en nuestro país y a la doble moral de nuestro tiempo. Los textos bordados ponen de relieve y resaltan está realidad al sacarlos de estas páginas y mostrarlos en una sala de exposiciones.
Esta línea de investigación se enmarca dentro de las labores tradicionales tales como coser, tejer, bordar, etc. que siempre han estado asociadas al ámbito de lo privado y lo doméstico y asociadas a lo femenino. El punto de cruz tiene además una carga sexista asociada a algo ñoño y bonito propio de amas de casa desocupadas.
Actualmente sigo incorporando nuevos textos e imágenes al proyecto.